El Papa Francisco ha expresado su profunda condena por el reciente asesinato del activista ambiental hondureño Juan López, en el municipio de Tocoa, en el norte de Honduras. El activista, conocido por su incansable lucha contra las operaciones mineras que amenazan los ríos y bosques de la región, fue víctima de un atentado a tiros a principios de mes.
Este trágico evento se suma a una preocupante lista de asesinatos en la región caribeña de Colón, donde en los últimos años se ha registrado una ola de violencia dirigida hacia defensores del medioambiente. López, miembro activo de una organización ecologista local, había perdido a tres compañeros el año pasado en circunstancias similares.
Estoy con los que ven pisoteados sus derechos fundamentales y con los que actúan por el bien común en respuesta a los gritos de los pobres de la tierra”.
Con su declaración, el Papa Francisco se une a una creciente voz internacional que exige justicia y protección para quienes defienden la naturaleza. La comunidad global sigue pidiendo respuestas y medidas para frenar la violencia que enfrentan los protectores del planeta.
Foto con fines ilustrativos