Desde 2018, un equipo de la Colaboración Internacional del Glaciar Thwaites ha estado investigando este glaciar, conocido como el “glaciar del fin del mundo”. Su última serie de estudios revela una alarmante aceleración en la pérdida de hielo, con proyecciones sombrías: el Thwaites podría colapsar en los próximos 200 años, lo que llevaría a un aumento del nivel del mar de hasta 3 metros, afectando gravemente a ciudades costeras como Miami, Londres y regiones vulnerables en el Pacífico.
El geofísico Rob Larter del British Antarctic Survey destaca que el retroceso del glaciar se ha intensificado en los últimos 30 años. Utilizando un robot submarino llamado Icefin, los científicos han descubierto que el glaciar se está derritiendo de maneras inesperadas, facilitadas por el agua oceánica cálida que penetra en sus grietas. Este fenómeno subraya la Antártida como un punto crítico para entender el futuro del aumento del nivel del mar.
Fotos con fines ilustrativos