Una de las pirámides más emblemáticas de México ha colapsado tras ser sometida a un implacable combo de altas temperaturas y fuertes lluvias. El Basamento Sur, una de las estructuras principales de esta joya arqueológica, ha sufrido daños significativos, afectando al menos seis cuerpos escalonados de la pirámide.
El calor extremo, que provocó grietas en la estructura, fue seguido por intensas precipitaciones que aceleraron el deterioro, culminando en el trágico colapso. El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ya se encuentra en el sitio evaluando los daños y ha activado el seguro que protege la zona arqueológica para iniciar los trabajos de restauración.
Tanto la comunidad arqueológica como el país entero lamentan profundamente esta pérdida irreparable, que afecta no solo al patrimonio cultural de México sino a la historia de la humanidad.