Oswaldo Miranda Víquez, director de la institución reveló que debido al alto número de incidencias los oficiales deben abandonar algunos puntos de regulación y que las distancias afectan los tiempos de respuesta.
Quisimos evidenciar estos datos con dos propósitos; por un lado poner a la vista el volumen de trabajo que se maneja solo en atención de colisiones, el otro ángulo es aprovechar para concienciar sobre la necesidad de conducir a la defensiva, sospechando de que los otros cometerán una imprudencia, pero también reflexionar si estamos siendo displicentes a la hora de conducir, pegándonos mucho al vehículo de adelante, usando el celular mientras conducimos, irrespetando una luz roja del semáforo, por ejemplos”, acotó Miranda Víquez
A menudo, cuando un oficial deja un punto de regulación, como un cruce, es para responder a un accidente. Muchos de estos accidentes son simples colisiones, conocidos popularmente como “besitos”, que suelen causar daños menores. Aunque los oficiales están comprometidos en atender todas las llamadas y aplicar las normativas correspondientes, desean enfatizar que muchos de estos incidentes podrían evitarse con una conducción más prudente.
Estamos en periodo de lluvias, guardar distancia es importante porque si la calle está mojada nos va a hacer más prolongado el proceso de frenado. A veces, no queremos que el vivillo se nos cole en la fila, pero por no guardar distancia, terminamos en un proceso de hasta horas porque chocamos, más todo el trámite judicial y de reparaciones”, agregó.
El aumento de accidentes en horas pico se debe a la mayor cantidad de vehículos en circulación, lo que requiere más recursos humanos para manejar tanto los cruces conflictivos como los accidentes.
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