El binomio compuesto por José Garita y el perro llamado Moskú, fueron los encargados de ubicar a las dos personas que estaban aterrados tras el desplazamiento que ocurrió la noche de este domingo en el sector de Laguna de Zarcero.
Una vez ubicadas las víctimas, los rescatistas inmediatamente procedieron a estabilizar la estructura para romper paredes, logrando acceder al área donde estaban sepultadas.
Después de tres horas de arduo trabajo en remoción de escombros y material del deslizamiento, que ponía en serio peligro no solo a ambas víctimas sino a los cruzrojistas, quienes lograron extraer a las pacientes en condición relativamente estables, sin embargo fueron trasladadas al centro médico donde las evaluaron.