El Hospital Max Peralta de Cartago ha llegado a su máxima capacidad operativa, lo que genera limitaciones tanto para la atención de los pacientes como para las funciones del personal médico. Esta situación ha sido destacada por la Defensoría de los Habitantes tras un informe que surgió de una denuncia del Sindicato Nacional de Médicos Especialistas.
La Defensoría señala que la falta de espacio adecuado afecta la logística del hospital, incluyendo el almacenamiento de insumos y equipamiento. Las instalaciones son insuficientes para atender la creciente demanda de servicios, lo que resulta en condiciones de hacinamiento y riesgo para la seguridad de los pacientes y del personal.
El Servicio de Emergencias, que no supera los 300 metros cuadrados, está diseñado para atender a 28 pacientes, pero en la práctica maneja entre 70 y 90. Además, el hospital carece de clínicas grandes, lo que agrava la situación, ya que es el único lugar en Cartago con equipos de rayos X, provocando largas filas y esperas.
El informe resalta que las condiciones ambientales del hospital, caracterizadas por mala iluminación y ventilación, contribuyen a un entorno adverso tanto para los pacientes como para el personal. Ante esta situación, la Defensoría recomienda conformar un equipo técnico que supervise el cumplimiento de las órdenes sanitarias y proponga mejoras urgentes.
Fotos Defensoría