En respuesta a las recientes afirmaciones del gobierno venezolano, el Departamento de Estado de EE.UU. ha desmentido categóricamente las acusaciones de que la CIA estaría involucrada en un complot para asesinar al presidente Nicolás Maduro. La declaración de Venezuela surge en un contexto de alta tensión y crisis política, después de las disputadas elecciones el pasado 28 de julio.
Diosdado Cabello, ministro del Interior venezolano, afirmó en una conferencia de prensa que la CIA, junto con el Centro Nacional de Inteligencia de España, estaría detrás de un plan para desestabilizar el país y eliminar a Maduro. Esta acusación, según Cabello, incluye a un infante de Marina de EE.UU. entre los detenidos en relación con el supuesto complot.
El Departamento de Estado de EE.UU. ha calificado estas afirmaciones como “categóricamente falsas” y ha reiterado su compromiso con una solución pacífica y democrática para la crisis en Venezuela.
Un portavoz del Departamento confirmó la detención de un miembro del Ejército de EE.UU. en Venezuela, pero enfatizó que esto no corresponde a ninguna implicación oficial o conspiración por parte del gobierno estadounidense. Además, el portavoz indicó que EE.UU. está al tanto de los informes no confirmados sobre la detención de otros dos ciudadanos estadounidenses, pero reafirmó que cualquier afirmación sobre la participación de EE.UU. en un complot es infundada.
La respuesta de EE.UU. llega en un momento en que la oposición venezolana y líderes internacionales cuestionan la legitimidad de la reciente victoria electoral de Maduro, que ha desencadenado protestas y disturbios en el país. Mientras tanto, el gobierno venezolano continúa investigando el supuesto complot, mientras mantiene su postura contra las alegaciones de interferencia extranjera.
Fotos con fines ilustrativos
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