- Se requiere mayor trabajo conjunto entre autoridades educativas y familia.
- Joven agresor fue presentado a la Fiscalía Penal Juvenil.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Costa Rica es el segundo país de Latinoamérica en casos de bullying escolar, siendo el primero Brasil.
El informe reveló que cerca del 11% de los niños costarricenses afirmaron haber sufrido acoso, además la institución ha destacado que este fenómeno no se limita solo a los espacios de menores en etapa escolar sino también que se ha registrado tanto en el ámbito universitario como en lo laboral.
A propósito del caso más reciente registrado en el país en el que una joven estudiante es agredida, escupida, maltratada, ofendida y burlada por otro joven que además recibe de una u otra forma el apoyo de otros estudiantes que viajaban en el bus escolar, Noticias Red Digital conversó con la psicólogo María Ester Flores, quién detalló las causas que originan este tipo de comportamiento y cómo afecta tanto a la persona que sufre el bullying como a quién hace el papel de agresor una vez expuesto a través de las redes sociales y la reacción que tiene la sociedad.
Nos conmueve ver tanta violencia desde los inicio de la adolescencia en nuestra sociedad, lamentablemente en el mundo y Costa Rica no se escapa los valores que antes sostenían nuestra sociedad, respeto, empatía, amor, solidaridad, apoyo, hace mucho tiempo que dejaron de existir en nuestra sociedad, actualmente los valores tienen que ver más con el poder económico".
Para la psicólogo existe un fallo general de las autoridades que sostienen la moral de la sociedad; destaca que desde la autoridad religiosa, económica, política y educativa, los jóvenes no tienen un soporte de valores que le permitan identificar el camino del bien.
En el proceso de identidad los jóvenes y niños dicen: yo no me voy a identificar con las figuras débiles, porque pierde uno en este mundo; me voy a identificar con las figuras poderosas y esas son justamente esa violencia"
Paréntesis de la agresión
La experta sostiene que esta situación obedece a una degradación a la mujer y que en los últimos tiempos ha prevalecido una educación social por medio de videos e inclusive la música cuyas letras incitan a esa violencia y las mismas mujeres se auto degradan sexual y emocionalmente.
En este video el bullying no era tanto de palabra ni golpes, era un deseo, un afán de humillar la condición de la mujer, era hincarla, botarla, sentársele encima, verla socialmente totalmente humillada y agredida, allí hay un placer por parte de quien la agrede sin sentir culpa, angustia ni miedo por lo que estaba haciendo".
Ambiente Social
En el caso del resto de los estudiantes que de forma pasiva se dedicaron a grabar las imágenes que luego compartieron con la idea de hacerlo viral, en lugar de evitar la situación, es otra arista de la falta de controles en la educación, ninguno hizo el video para alertar a las autoridades.
Como mecanismo de defensa y de supervivencia ante la fuerza de este muchacho, la chiquita le daba una risa nerviosa y se paralizó como muchas mujeres que luego de ser violadas se sienten culpables porque no pudieron defenderse, no pudieron gritar, salir corriendo, pero la muchacha dijo claramente ´no, ya no más, ya no más´ y ni el agresor ni el resto que estaban allí y son indirectamente responsables y culpables no hicieron nada, disfrutaron del evento sin tomar el cuenta los sentimientos de la muchacha".
Secuelas
Flores destaca que es importante el acompañamiento psicológico en estos casos, puesto que la afectación no es igual cuando la agresión es privada a este caso en el que no solo Costa Rica sino en otras partes del mundo se observó tal humillación.
Explica que la vergüenza arropa también a la familia, quienes en este momento son el soporte principal de la menor.
La imagen que ella ve es de un hombre agresor y de una sociedad pasiva, es una injusticia y una traición que esa chiquita siente y eso le va a llevar tiempo recuperarse".
Agresor Narcisista
La psicóloga sostiene que las imágenes muestran que no siente miedo ni culpa y que ello representa la actitud de una un ser humano que es un riesgo social y que la rehabilitación, en casos como estos, es complicada debido a que ya la estructura de la personalidad ya está definida.
Vemos mucha intención y muy repetida la agresión (...) el pronóstico de las personas que agreden así hacia un cambio interior es muy poco probable, va a tener que vivir bajo límites y restricciones para frenar conductas que no son socialmente aceptables.
Fotos con fines ilustrativos / Captura Video RRSS
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